En paz me acuesto y me duermo, porque solo tú, Señor, me haces vivir confiado.
- Salmo 4:8
David pasó por una gran cantidad de momentos difíciles en su vida. Tuvo que enfrentar fieras, al gigante Goliat, ejércitos, al rey Saúl, y hasta llegó a ser perseguido por su propio hijo, Absalón.
Y nosotros, ¿cuáles son las actitudes que revelamos normalmente cuando atravesamos por fases difíciles? ¿Perdemos el sueño? ¿Nos desanimamos y nos frustramos? ¿Nos desesperamos?
David revela en este salmo una actitud completamente diferente. Delante de grandes dificultades, frente a problemas graves o enemigos amenazadores, él descansaba en Dios. El corazón de David se desbordaba de paz y seguridad porque confiaba plenamente en el Señor que tiene el control de todas las cosas. Así es como él conseguía dormir en paz y tranquilidad.
¿Cómo lograr dormir en paz hoy?
Ora y entrégale al Señor tus preocupaciones, tus problemas y dificultades.
Cree que solo Dios puede garantizarte una vida segura.
Lee la Biblia y descubre la protección permanente de Dios sobre sus hijos.
Ten fe y la confianza de que Jesús cuida de ti.
Para orar:
Señor, muchas gracias por tu cuidado y protección en este día. Confío que estoy seguro contigo porque tú eres más grande que todas las amenazas y problemas que surgen. Ayúdame a descansar y a reposar en paz, creyendo que cuidas de mí todo el tiempo. Amén.